Poesía
Francisco Zalduendo construye el santuario de sus obsesiones, réplica las melodías y los acoples de la vida cotidiana para repensar la soledad y la intimidad como si todo el tiempo fuera por primera vez.
Poesía
Francisco Zalduendo construye el santuario de sus obsesiones, réplica las melodías y los acoples de la vida cotidiana para repensar la soledad y la intimidad como si todo el tiempo fuera por primera vez.